¿Sabías que Girona fue la primera ciudad española en contar con alumbrado público eléctrico?
La historia del alumbrado público eléctrico en España arranca en el año 1875 con la construcción de la primera central eléctrica en Barcelona; y con la posterior creación de la Sociedad Española de Electricidad en 1881, en la capital condal.
Sin embargo, como comentamos hace unas semanas en las páginas de iElektro, no sería hasta ese mismo año 1881 cuando municipios como Comillas, en Cantabria, comenzaran a usar electricidad para alumbrar sus calles con lo que se llamó la luz de los indianos.
Pero si hablamos de un alumbrado público genuino alimentado por electricidad, el honor de ser la primera ciudad española en implementarlo reca en Girona, que lo inauguró en una fecha tan temprana como 1886.
Durante la sesión del 4 de diciembre de 1885, el Ayuntamiento de Girona acordó la instalación de un determinado número de lámparas de incandescencia, adoptándose, en lugar de la instalación de máquinas de corriente continua Gramme, las dínamos Zifernowsky y Deré de corriente alterna, de 37 caballos cada una a 120 voltios, con una intensidad de corriente de 16 amperios, alimentando 193 lámparas incandescentes y cuatro focos de arco voltaico por medio de dos hilos paralelos de 45 mm. de diámetro, que a su vez alimentaban cuatro transformadores.
Esta instalación, propuesta por los ingenieros Planas y Flaquer fue inaugurada el 24 de julio de 1886 y es remarcable que siga en funcionamiento aún a día de hoy.
Desde un punto de vista meramente eléctrico, Girona fue la población más interesante del mundo entero, ya que fue la primera población alumbrada por corriente alterna.
