El sector de la iluminación creció un 5 % en 2022
Según la previsión de cierre de Anfalum, el sector de la iluminación cerrará 2022 con un crecimiento del negocio del 5 % respecto a 2021, hasta alcanzar una facturación de 1.350 millones de euros, por los 1.286 del pasado ejercicio. Esta cifra mejora los datos de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) nacional que, según las previsiones, se situará en el 4,3 %.
Analizando en profundidad los datos ofrecidos por Anfalum, vemos cómo el negocio a nivel nacional cerrará el ejercicio con un crecimiento del 4,95 %, mientras que, desde la perspectiva de las exportaciones, el volumen de negocio en el sector de la iluminación aumentará un 6 %: pasando así de los 460 millones de euros del pasado año 2021 a los 489 millones del actual 2022.
Tomando cada subsector como una entidad independiente, la evolución del negocio ha sido la siguiente:
- Alumbrado exterior: Es el subsector que más crece en 2022, un 10,8 %, hasta los 442 millones de euros.
- Alumbrado interior técnico: El negocio de esta área aumenta un 2,3 %, hasta los 531 millones de euros.
- Alumbrado decorativo: +3,5 %; ha pasado de 146 millones de euros en 2021 a 152 millones en 2022.
- Fuentes de iluminación: Se mantiene prácticamente igual que el año pasado; crece un 1,3 %, hasta los 96 millones (un millón más que en 2021).
- Componentes: A pesar de la crisis de suministro, este subsector también crece, +2,6 %, de 99 a 102 millones de euros.
- Báculos y columnas: Aunque Anfalum todavía no dispone de la cifra concreta actualizada, la asociación estima que este segmento estará en línea con 2021.
Previsiones para 2023
A través de las palabras de la asociación, se puede entender que 2023 es uno de los años que más complicaciones ha presentado a la hora de llevar a cabo una previsión, al verse obligado a tener en cuenta factores cuyo impacto es realmente complicado de descifrar e, incluso medir, como por ejemplo, unos fondos europeos que apenas se han aplicado – excepto en la rehabilitación de edificios.
Y es que todas las previsiones económicas anuncian una desaceleración de cara al año que viene. Un factor al que hay que añadir que el próximo 2023 es una año de elecciones, y estos tienen la tendencia de ser siempre cursos valle; sin embargo, hay factores (fondos europeos, elevado precio de la energía…) que pueden augurar cierta esperanza de crecimiento.
En lo relativo a la iluminación interior, la previsión es similar, ya que la construcción y la rehabilitación de edificios va a seguir bastante activa. Esto permite estimar un crecimiento del 1,4 % – acorde a las previsiones relativas al PIB- aún así notablemente por debajo del histórico del sector.
