El consumo mundial de electricidad de los centros de datos se duplicará en 2026, según un informe de la AIE
- La IA y las cargas de trabajo de criptomoneda impulsan la demanda.
Según un nuevo informe, el consumo eléctrico de los centros de datos se duplicará de aquí a 2026, debido al aumento de las cargas de trabajo que consumen mucha energía, como la inteligencia artificial y la minería de criptomonedas.
El informe anual sobre electricidad de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) señala que los centros de datos consumieron 460TWh en 2022, una cifra que podría aumentar a más de 1.000TWh en 2026 en el peor de los casos.
Los desarrollos de centros de datos en Irlanda están consumiendo altos niveles de electricidad
Según el informe, los 460TWh consumidos por los centros de datos en 2022 representaron el dos por ciento de todo el uso mundial de electricidad. Según los autores, la potencia de cálculo y la refrigeración son los dos procesos que más energía consumen en los centros de datos, y el rápido crecimiento de los servicios relacionados con la inteligencia artificial en los últimos 12 meses significa que los proveedores han estado invirtiendo en GPU de alto consumo energético.
El ritmo al que aumentará el consumo de electricidad de aquí a 2026 dependerá del «ritmo de implantación, el alcance de las mejoras de eficiencia y las tendencias de la inteligencia artificial y las criptomonedas», según el informe, pero los autores esperan que la demanda se sitúe entre 650 y 1.050 TWh. Este aumento equivale a sumar todo el consumo energético de un país como Suecia, en el extremo más bajo de la escala, o Alemania, en el más alto.
En Estados Unidos, que según el informe alberga el 33% de los centros de datos del mundo, se espera que el consumo aumente de 200TWh en 2022 a 260TWh en 2026, alrededor del 6% de todo el consumo eléctrico del país.
La situación es más grave en Irlanda, donde, en 2026, los centros de datos podrían representar el 32% de todo el consumo eléctrico debido al elevado número de nuevas construcciones previstas. Esta cifra contrasta con el 17% de 2022. Como informó DCD, el Gobierno irlandés rechazó el año pasado las peticiones de limitar el número de nuevos proyectos de centros de datos en Irlanda debido a su consumo energético.
Según el informe, la legislación podría reducir parte de esta demanda de electricidad, ya que la directiva de eficiencia energética de la Unión Europea, publicada el pasado mes de septiembre, impone nuevas obligaciones a los operadores de centros de datos del continente, la primera de las cuales es la obligación de presentar informes de emisiones para cualquier centro de datos de más de 500 kW. Entrará en vigor en mayo.
Los operadores de centros de datos también están experimentando con tecnologías más eficientes de refrigeración y reutilización del calor. En las últimas semanas, proveedores como Aligned y Stack han lanzado bastidores de alta densidad refrigerados por agua para cargas de trabajo de alto consumo energético, como la IA.
La semana pasada, DCD informó de que Microsoft había conseguido alimentar uno de sus centros de datos durante dos días con un sistema experimental de pilas de combustible de hidrógeno, aunque la viabilidad de esta tecnología sigue siendo dudosa.
El informe de la AIE también predice que el crecimiento de la producción de energía renovable en los próximos años será más rápido que el de las energías renovables.
Mark Yeeles, Vicepresidente de la división de energía segura de Schneider Electric Reino Unido e Irlanda, ha declarado que las conclusiones del informe «no son ninguna sorpresa». Según Yeeles: «En estos momentos, el consumo general de nuestros datos y hábitos digitales -medios sociales, correo electrónico, aplicaciones empresariales, streaming, juegos, investigación científica y empresa-, combinado con la adopción de plataformas de IA, está agravando el crecimiento mundial de los centros de datos a un ritmo fenomenal.»
Pero cree que la disposición del sector de los centros de datos a integrar nuevas tecnologías que reduzcan la demanda de la red significa que puede ser parte de la solución.
En cuanto a la situación en Irlanda, Yeeles pidió una «acción inmediata y sostenible» para evitar una crisis eléctrica. En su opinión, es importante que «el gobierno y la industria colaboren más estrechamente y combinen las tecnologías existentes con ingeniería innovadora para garantizar el futuro energético, económico y tecnológico del país».